En este mismo instante hay padres sumidos en desesperación y angustia por la situación de sus hijos. Malos hábitos, drogas, delincuencia, hijos dominados por el mal. Recuerda que la necesidad de nuestros hijos también es la nuestra. Es hora de interceder por nuestros hijos.
Conoce historias de personas cuyas vidas cambiaron cuando conocieron a Dios.
Testimonios del poder transformador de Jesucristo.
Escrito el 3 de mayo de 2015, por Roberto Rodriguez Aliaga